Silenciadas

“Silenciadas” es un trabajo fotográfico que documenta el abandono de los barrios de mi ciudad, poniendo la mirada en sus casas cerradas, puertas y ventanas claveteadas que nos hablan de decadencia, de crisis. La luz plana buscada en las fotografías, la falta de contrastes, la falta de luces y sombras, es un reflejo de su alma apagada, del vacío que ha quedado entre sus paredes, del declive de una ciudad.

Nos habla de casa deshabitadas. Muros de ladrillo clausuran sus puertas, sus ventanas, Han quedado sin vida, sumidas en la oscuridad. Hogares donde antaño olían sus cocinas, correteaban los niños, sonaban voces y susurros, hoy están apagadas, silenciadas. Muchas de estas casas se construyeron en los años 30, alrededor de fábricas de calzado emergentes y son muestra de cambios, de tiempos que entonces fueron prósperos, a los que siguieron otros de crisis económica y abandono. Viviendas en las que, en muchos casos, faltando ya los padres, los hijos se marcharon y dejaron cerradas, claveteadas, emparedadas, evitando así hurtos y okupas.

Cuántas historias, cuántas vivencias encierran. Objetos olvidados dentro, cautivos entre sus paredes, o estancias vacías, desconchadas. Este trabajo trata de darles un valor y quizá en algún momento, algún día, pueda volver a entrar la luz en ellas y recuperen la dignidad que una vez tuvieron.

Elda 2020.